Despertarse, odiar al despertador, calentar la máquina y rodearte del aroma del café de la mañana. De cafés hay muchos, pero los verdaderos amantes de su sabor y olor nos gusta siempre invertir por los mejores granos, las mejores casas y es por eso que nace una tendencia al alza, el café de especialidad.
Tanto si prefieres un buen espresso, un espumoso capuchino, un rápido americano, un endulzado latte, un Moca o un au Lait, te guste el tipo que te guste de café todos tienen algo en común: no sabrán igual si la materia prima no es increíble. Estamos hablando del café.
Un café elaborado artesanalmente con unos productores únicos aplaudidos por la crítica internacional
El café de especialidad es una forma de café elaborado de forma artesanal y siguiendo todos los procesos desde la extracción de los granos en las fincas hasta su empaquetado, pasando por rigurosos controles estrictos para competir en un mercado altamente competitivo.
Este proceso de café más meticuloso y cuyo desarrollo se realiza bajo la atenta mirada de los expertos para traer a la mesa el café de la más alta calidad disponible.
La elaboración de este producto se gesta en nuestro país que produce un café fresco de temporada recién tostado con el añadido de producto de cercanía; transparencia sobre todos los procesos de elaboración; y poniendo en valor el esfuerzo de todos los profesionales que participan en la cadena de elaboración y reduciendo los intermediarios para empoderar a los recolectores de café.
Obsesionados por conseguir el mejor producto para sus consumidores, el café de especialidad ha reunido los mejores especialistas de este producto para garantizar un producto sin precedentes, innovando en los procesos para sacarle todo el potencial grano a grano.
Nuevas Formas de Consumo
Como si se tratara de una suscripción a un servicio de streaming al que estamos acostumbrados en nuestro día a día, las empresas ofrecen planes de suscripción para recibir de forma mensual o única el producto en casa o establecimientos.
Fotografía: Nathan Dumlao