Los precios internacionales del café se han reprimido hasta los 110 dlls por libra al cierre se esta edición, esto pone en jaque a los productores, y este es el principal motivo que los hace manifestarse, si bien es cierto que existen cafés de especialidad, sabemos que es un porcentaje mínimo el precio que alcanza este café, esto para los que culpan a los productores de que se les paga bajos precios por la mala calidad.
Nuestro café el Mexicano, cuenta desde siempre con una calidad especial, que es reconocida en el mundo, las causas de los precios bajos es otra, es tiempo de avanzar en la cadena productiva del café, existen personas que quieren seguir en el colonialismo, estamos en el siglo XXI y no nos damos cuenta que el campesino mas humilde tiene acceso a la tecnología y a la información, en este caso el productor de café sabe lo que sucede en su negocio, que existen lugares donde se vende su café a precios desorbitantes y que el productor ve solamente las migajas de lo que su producto genera, sabemos de la buena voluntad de muchos comercializadores que tienen un grupo numeroso de capacitadores de campo y que por ese medio está en contacto permanente con el productor y sabe de sus problemas, a menos que los intermediarios, los compradores sean los que se beneficien a costa del productor, y si es así, hay que tomar también las medidas necesarias en bien del negocio y que no sea motivo de movimientos de productores.
En nuestro punto de vista, tenemos mas que entendido que el productor difícilmente dejará lo único que sabe hacer y el comercializador está en la misma situación, lo que haría de nuestro país como ejemplo es que se llegue a un acuerdo donde todos los integrantes de la cadena productiva del café se encuentren y se llegue a acuerdos razonables y esa es la necesidad imperiosa, el diálogo y acuerdos.
La Amecafé, donde se supone que es la mesa de acuerdos no se tocan los temas como el de encontrar el acuerdo con sus integrantes, si se pretende poner como intermediario a los políticos es como regresar a situaciones del pasado superadas. Consideramos que la solución a crear un panorama en el que los productores no sean los que carguen con bajos precios, mientras que otros, llámense industriales o comercializadores sean los beneficiados en este negocio. En este sentido el gobierno debe de participar para considerar al café como un producto que tenga un precio de garantía como otros granos o bien apoyar a los productores con un fondo de compensación, como se a solicitado para mitigar las pérdidas ocasionadas por la roya y por los bajos precios.
Fotografía: Yanapi Senaud
